El Raval de Mar

EL RABAL DE MAR               

EL BARRIO DE PESCADORES DE PINEDA

Un barrio con identidad propia que nació separado del núcleo histórico por los huertos de “sota vila”.

Alrededor de 1760, cuando el litoral ya no sufría los ataques piratas, al final de la calle de Mar nació el rabal de Mar, un barrio de pescadores. Algunos de ellos ya eran pescadores que tenían casa en el interior, otros buscaban una alternativa con la pesca.

Entonces, la actividad económica en Pineda empezaba a recuperar terreno gracias a años de cierta estabilidad. Y se diversificaba más allá de la agricultura: artesanos, productores de cáñamo y lino, carreteros, fabricantes de botas de vino, pescadores, carpinteros o marineros.

Las casas que se edificaron en el rabal de Mar eran viviendas de 5 metros de anchura con planta baja, piso y un huerto detrás. Algunas, llamadas popularmente por “cases-cuina”, se construían retiradas de la línea de la calle, siendo media casa, y dejando un espacio o patio delante. Entrando encontraríamos la cocina, la despensa y una mesa, y una habitación en el primer piso. El patio delantero permitía ampliar la casa hacia la calle si la situación económica lo permitía.

Casas – Cocina de pescadores – Raval de Mar

Casas de pescadores, con cocina en la planta baja, habitación en el primer piso y dos patios, uno en la parte trasera y el otro en la parte delantera. Este patio delantero permitía ampliar la casa-cocina hasta la línea de la calle si la situación económica lo permitía. Esta parte de la calle de Mar dicha Raval de Mar se urbanizó a partir de mediados del siglo XVIII, una vez los piratas dejaron de representar un peligro para los residentes.